Octubre de 2009, me regalan una Aquila GV650. Automaticamente, destrono la Marita. Este aumento de categoria ya nos lleva a muchos mas sitio, con mucha mas confianza y seguridad...
Muchas horas de trabajo tuve que dedicar para personalizarla a mi gusto, pero la admiración que provocaba, recompensó tanta dedicación...
Esta montura nos lleva a muchos mas sitios, incluso de nuevo a Paris, en esta ocasión a Disneyland. Al regreso, y tras mucha meditación, tomo la decisión de abandonar el lado oscuro, y elegir una máquina mas propicia para grandes rutas. Literalmente, se puede decir que me la quitaron de las manos...
